Un buen descanso es una de las cosas que pedimos cada vez que llega la noche y nos metemos en cama, ¿verdad? Después de todo, y según los expertos, 24 años de nuestra vida nos los pasamos durmiendo, ¡qué menos que hacerlo bien y placidamente! Nuestra habitación es el rincón de la casa más personal, al que recurrimos cada vez que necesitamos descansar sin que nadie nos moleste. Pero ¿hasta qué punto conseguimos un buen descanso? ¡Las claves!
Un descanso reparador es aquel que iniciamos inmediatamente o a los pocos minutos después de meternos en la cama, se prolonga un promedio de 8 horas sin interrupción y transcurre de forma sosegada sin apenas darnos cuenta. ¿Ya no lo recordamos? No es fácil de conseguir, pero sí podemos poner todos nuestros medios para un buen entorno.
Como bien decimos, las horas de sueño son fundamentales para cualquier persona y un buen descanso va a facilitar nuestro rendimiento diario además de garantizar nuestro buen humor y aguante físico durante toda la semana. Aromaterapia, evitar ambientes demasiado cálidos o húmedos, música relajante…son muchas cosas las que hay que tener en cuenta.
Para empezar, como es lógico, una de las claves está en tener una cama cómoda y un colchón adecuado que garantice nuestro correcto descanso. El látex es una buena opción, mejor si es de 20 cm. de grosor. Necesitamos un colchón que cuide nuestra espalda y la mantenga recta, prestando atención a la hora de elegirlo a nuestro peso y la postura en la que solemos dormir.
Es aconsejable también el ventilar la casa siempre que se pueda antes de dormir, especialmente en verano. La temperatura de la estancia no debe superar los 17º C durante el descanso y hay que evitar dormir con demasiada ropa puesta o pijamas sintéticos. Las sábanas siempre de algodón, no echarnos 40 mantas encima que descarguen mucho peso sobre nosotros y por supuesto cambiarla con frecuencia para que el bienestar y el confort sean mayores.
Otro punto importante es el de mantener la habitación ordenada y libre de miles de objetos que entorpecen nuestra percepción visual. Cuanto más organizado y libre esté todo mayor va a ser el descanso obtenido, ya que una estancia limpia y bien colocada aporta serenidad y una mejor energía, favoreciendo la respiración.
Los colores también son otro aspecto fundamental a tener en cuenta a la hora de facilitar un buen descanso en nuestras habitaciones. Como siempre, recordar que los tonos pastel son los más indicados a la hora de garantizarnos un correcto descanso y ambiente relajante que invita al descanso, ¿no te parece en las fotos?
Y por supuesto, la calidad del descanso va también en función de la luz, tanto artificial como natural y de los tejidos elegidos para los estores y las cortinas de cada habitación. Como es lo que nos ocupa, no podemoa dejar pasar la ocasión de dejar algunas recomendaciones. En el caso de no querer que entre nada de luz disponemos en nuestra tienda online de cortinas oscurantes o de estores enrollables en este tejido.
Si ya disponemos de persiana exterior para poder evitar la entrada de luz por la noche, los tejidos screen y traslúcido nos van a proporcionar una entrada de luz muy adecuada y perfecta para crear ambientes muy acogedores. Y, por supuesto, para una comodidad extrema contamos con la opción de poder motorizar los estores.