Slow Deco: el estilo decorativo más calmado

slow deco

Ya sabéis que en este blog nos encanta hablar de decoración y estar al día siempre de las nuevas tendencias que van surgiendo. Hoy aprovechamos para hablaros del estilo Slow-Deco, que aunque parece un nombre que nos estamos inventando ahora mismo, está empezando a tener muchos adeptos en el mundo de la decoración y el interiorismo por estar directamente relacionado con el descanso y el tomarse la vida ‘con calma’. ¿Conoces sus claves?

Y sí, nos suena a ‘SlowLove’, que es la tienda online que Sara Carbonero ha abierto con dos amigas y en la que precisamente emplea esta filosofía de vida, que se refleja ahora también en este nuevo estilo decorativo. Vivir en una ‘casa lenta’ es igual a sentirse bien y desconectar, que es lo que todos buscamos al llegar al hogar.

El lugar y el diseño arquitectónico tienen su importancia, pero el factor más importante es la actitud. Puedes hacer que tu casa sea más lenta mediante pequeñas reformas o cambios en la decoración.

Slow Deco

Las claves del estilo Slow Deco

Una de las claves de este estilo es el buscar la armonía gracias a una sencillez decorativa, que transmite suavidad, serenidad y comodidad. Nada de sobrecargas, y siempre en busca de la uniformidad. El resultado es una vivienda única, un refugio de calma que tiene mucho de cada uno.

El estilo Slow Deco recuerda un bastante al nórdico, y se centra mucho en los colores neutros. Destaca también en este estilo la utilización de azules en todas sus variedades, puesto que el azul es un color que además transmite todos los valores que se buscan en este estilo.

Otra de sus claves es el saber darle un segundo uso adecuado a los muebles, lo que reflejará también nuestros gustos y nuestro toque más personal. Los palés vuelven a ser grandes aliados y el toque ‘vintage’ que podamos conseguir será siempre bienvenido.

Materiales reciclados, naturaleza en forma de plantas y toques de verde, lo artesanal… En definitiva, hay que respirar y tomarse la vida con más calma, disfrutando cada momento del día.

Slow Deco

¿Cómo apuntarse en casa a este estilo?

Pasa por pequeños detalles, que nos van a hacer la vida más confortable y cómoda. Por ejemplo, nada más entrar por la puerta lo ideal es tener un recibidor en el que dejar las llaves de casa y un perchero para el abrigo, la bufanda y el bolso. Que no falte el paragüero para los días de lluvia y también algún mensaje positivo en las paredes. Hoy en día tenemos muchas opciones a elegir, desde marcos de fotos a láminas para plastificar o encuadernas y colgar en la pared. En la entrada quedarán perfectas.

Otro de los puntos fuertes de una decoración slow es el dormitorio, puesto que es el lugar de descanso y también de relajación: ya sea viendo la tele, leyendo un libro o siemplemente parando un poco.

Los materiales, textiles principalmente, tienen que ser cómodos y además tener el aspecto de que lo son. En el caso de los estores y las cortinas, lo mejor será optar por tonos neutros como el blanco, el beige o el gris.

Nuestros estores enrollables son perfectos para este tipo de estancias, ya que aportan buena presencia y al no ocupar nada de espacio son perfectos para una decoración relajada y sencilla.

Deco Slow

También la cocina es otro de los grandes focos de la casa del estilo Slow Deco. Podemos jugar con multitud de detalles, como alguna idea especial para apuntar la lista de la compra, mantener siempre todo ordenado, algunos alimentos a la vista en tarros de cristal o crear rincones especiales. En su día te sugerimos el rincón del café, una idea muy retro con un toque muy especial: ¡échale un ojo!